13 abr 2011

MAS CANDIDATOS QUE DEDOS TIENEN LAS MANOS

José (Pepe) Martel

+

No salimos de unas elecciones para entrar en otra. Eso no me sorprende y creo justo celebrar contiendas donde sean los votantes quienes elijan a sus representantes. Cuando se pensaba que la propaganda politica tendría un respiro volvieron al ataque la mayoría de ellos con esa forma de propaganda sucia. Sacar los trapos sucios al oponente y perpetuarse como los inmaculados es la moda de estas campañas publicitarias.

Los contrincantes debía ser más mesurados en sus descargas y evitar insultos amañados y mal intencionados, eso desluce y crea malestares. Si en vez de utilizar estos métodos se expusiera una propaganda saludable matizada con bases y fundamentos sólidos de su futuro trabajo el mensaje resultaría mejor. No alabarse tanto y ser más constructivo con el representado abordando cuestiones positivas y simultaneamente hasta serían admiradas por el contricante mismo. Es como en el boxeo de ahora que escenifican un match cargado de trompones y abracamientos inutiles olvidadas de la técnica profesional de ese deporte. Ya no se desarrollan peleas donde el estilo clásico de esos grandes pugilistas de antes marcaban derechas, opercuts, ganchos, bolo punch tipo Kid Gavilán y se convertían en verdaderos gladiadores arrastrando mutitudes y reconocidos méritos. Eso se acabo en el deporte de los guantes denrro del cuadrilátero.

En las campañas electorales debían establecese reglas de prudencia y de respeto. Los postulados son personas de cierta relevancia y prestigio dentro de la sociedad actual y debían medir con ética profesional de como atacar al contrario, sin caer en chapucerías y chavacanerías fuera de lugar. La gente no es boba y se comentan esas vulgariedades utilizadas en sus intervenciones ante microfonos y las cámaras de televisión. Esos anuncios a toda hora a veces aburren y lo triste del caso que el mensaje verdadero del servidor no llega al oído del pueblo que realmente es quien selecciona al ganador.

La prudencia y el mensaje claro, limpio y sincero es el que debe de triunfar y no el que produce con el animo de desmeritar e insultar al contrario. Ojalá los aspirantes despierten de esa pesadilla de acosar y si demostrarle al público quien es el más capacitado, instruído y honrado para ocupar el cargo público del cuál es merecedor.

Miami, Florida, USA

joselmartel@yahoo.com

No hay comentarios:

Páginas