EL RACISMO EN CUBA 3 de Junio del 2011

Por Fernando Milanés

En el repetido esfuerzo del régimen totalitario en Cuba, de hacer cierta evaluación a su falta de logros, pero sin hacer un verdadero “mea culpa” y abandonar el mando, acepta ahora el continuado racismo en Cuba y la obvia diferencia en el “status” entre los blancos y negros. Cuba fue un País con esclavos y aunque los negros se destacaron como mambises y héroes en las guerras de independencia, fueron mayormente olvidados después de la victoria. Durante los 50 años de Republica, pasando por regímenes electos y dictatoriales, una Constitución progresiva del año 1940, y la ilegalidad de la discriminación, la diferencia entre las razas en materia de economía, viviendas y oportunidades existía. Los que como yo, tuvieron la dicha de vivir en la Cuba pre-Castrista y gozamos de los muchos beneficios y progresos de esa época, nos cuesta trabajo admitir problemas existentes como el racismo y la pobreza. Todos los blancos teníamos desde niños amigos negros con los que jugábamos, estudiábamos y compartíamos, pero tenemos también que recordar que no asistíamos con ellos a los restaurantes, cines o clubes privados y raramente a nuestras casas. Al igual que la pobreza, la educación y los servicios de salud, se estaban logrando adelantos y hay que determinar todo lo que se hubiera adelantado con otros 50 años de Democracia. Esto nunca lo sabremos, pero lo que sí está demostrado es que después de medio siglo de tiranía, fusilamientos, y robos, hay más pobres, la educación y los tratamientos médicos han empeorado, la diferencia de clases y la discriminación y el racismo persisten o han aumentado, y la gerontología Castrista se mantiene en el poder.