El mandatario estadounidense, Barack Obama, declaró este miércoles que mientras sea presidente estará dispuesto a cambiar la política con Cuba, siempre y cuando se produzcan virajes políticos y sociales significativos.
En una mesa redonda con internautas hispanos celebrada en la Casa Blanca, Obama se declaró convencido de que él mismo presenciará un día a un candidato hispano a la presidencia de Estados Unidos.
“Mientras sea presidente, siempre estaré dispuesto a cambiar nuestra política con Cuba, siempre y cuando empecemos a ver una seria intención, de parte de las autoridades cubanas, de dar libertad a su propio pueblo”, dijo Obama.
“No sé qué es lo que sucederá en los próximos cinco años, pero estaremos atentos. Si vemos un movimiento positivo, reaccionaremos de forma positiva”, dijo.
Obama, candidato a su reelección en 2012 para otros cuatro años, ha suavizado durante su gobierno varias medidas de la batería de sanciones contra el régimen castrista.
Los cubanoestadounidenses pueden ahora mandar remesas sin límites, ir tantas veces como quieran a la isla y varias categorías de viajeros, como científicos, estudiantes o deportistas, tienen también mayor flexibilidad para volar a la isla.
Luego de que uno de los internautas preguntó al mandatario cuáles serían las condiciones exactas para levantar el embargo que Estados Unidos mantiene contra la isla desde 1962, Obama dejó entrever que no era necesario que el pueblo cubano gozara de un “sistema de mercado perfecto”.
“Obviamente, comerciamos y mantenemos intercambios con numerosos países que están lejos de ser democracias liberales” perfectas, explicó el presidente.
Pero entre los derechos fundamentales están el de aspirar a cualquier tipo de trabajo, a poder cambiar de empleo cuando se quiera o a lanzar una empresa, explicó.
Igualmente, “si viéramos una liberación de prisioneros políticos, la posibilidad para la gente de expresar su opinión y de exigir cuentas a su gobierno, esos serían (cambios) significativos”, añadió.
Si se produjeran esas transformaciones, “obviamente reexaminaríamos nuestra política en su conjunto”, dijo Obama.
El régimen cubano, sometido a una grave crisis económica, ha anunciado en los últimos dos años una serie de medidas de liberalización para “actualizar” el modelo comunista.
Pero “hasta ahora no hemos visto esa clase de espíritu genuino de transformación que justificaría que levantáramos el embargo”, insistió Obama.
“Estoy absolutamente seguro de que durante mi vida tendremos a un candidato latino para presidente que sea muy competitivo y con posibilidades de ganar”, señaló por otra parte.
Los hispanos, primera minoría del país con más de 50 millones de personas, es el grupo que está creciendo más rápidamente, “y con cifras viene poder político”, dijo Obama.
“Ahora, el reto político para los latinos en el país es: ¿Se están registrando? ¿Están votando? No hemos visto los niveles de participación necesarios para que los números se traduzcan en poder político”, dijo.
Obama dijo esperar que en las elecciones de 2012 y en las siguientes “sigamos viendo un aumento de la participación” y eso “inevitablemente llevará a que los dos partidos (demócrata y republicano) sean más receptivos a los temas latinos”.
En las elecciones de 2008 dos tercios de los hispanos que acudieron a las urnas votaron a favor de Obama.
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