El abuso del poder y el terrorismo

Por: José M. Burgos

El terrorismo es un azote que ha sufrido la humanidad a través de los siglos que no ha sido posible erradicar.
El terrorismo se define a partir de actos violentos, cuyo objetivo es infundir pánico para lograr un objetivo.

Para el terrorista, que es un fanático ciego al dolor y sordo a la razón, el fin justifica los medios, sin importarle cuán viles sean.

Hay grupos terroristas como las FARC que se hacen llamar guerrilleros, pero no son más que delincuentes despiadados que roban, extorsionan, violan y asesinan a mujeres, ancianos y niños sin piedad, con el pretexto de alcanzar un ideal que favorezca a los más necesitados, pero es precisamente a estos, campesinos indefensos, a quienes masacran.

¿Qué ideales pueden tener unos asesinos que se nutren del narcotráfico y del secuestro?

Nada, absolutamente nada justifica los actos de barbarie que cometen estos grupos que sólo dejan dolor y desolación.

El mundo entero está en la obligación moral de condenar y castigar enérgicamente a todos los gobiernos y grupos que cometan abuso de poder o actos de barbarie.

Estos son problemas que de una u otra forma atañen a todos los seres humanos que deberían preocuparnos y que, por lo tanto, deberíamos luchar en bloque contra esos flagelos y no permitir que sigan creciendo por culpa de nuestra indiferencia.


burgos01@bellsouth.net