Por Elsa I. Pardo
2003
La prostitución tuvo su origen religioso en Babilonia, bajo "La
Prostitución Sagrada". Es antiquísima, complicada y difícil de erradicar.
En la antigua Grecia existían prostitutas públicas y privadas, en Roma
nació el "proxenetismo", la moderna prostitución occidental y los
actuales burdeles.
A partir de 1959, Cuba tuvo transformaciones económicas, políticas y
sociales, eliminando la prostitución tradicional que existe en todos
lados. Sin embargo, fue difícil eliminarla alrededor de los puertos, entre
funcionarios del gobierno y otras personas.
En 1971 se institucionalizó el sistema de las escuelas-internados en el
campo, para los adolescentes de 12 a 18 años de edad. Se
multiplicaron las madres adolescentes de forma alarmante. El 25% de
los niños nacidos anualmente tenían una madre menor de edad
y entre las mujeres que recurrían al aborto, entre el 30% y 40% eran
adolescentes. Los que causaron los embarazos, alumnos, adultos o
maestros, no tuvieron que temer ningún tipo de responsabilidad.
El exceso de libertad sexual, el alejamiento familiar, sin educación
sexual y la falta de base religiosa trajeron estos resultados. La religión
es un medio de comunicación que impone auto-disciplina y cierta
medida de ascentismo (renunciación), de acuerdo con las leyes de
Dios. Da apoyo psicológico, consolación y reconciliación.
Se desató un libertinaje en todo el país donde predominó el "amor libre".
La Revolución le dió a la mujer la libertad sexual, tener hijos sin
matrimonio, abortar cuando querían, embarazos y maternidad
involuntarios y aumentaron las enfermedades de transmisión sexual.
También se realizaban pesquisas de homosexuales para expulsarlos de
las universidades.
La revolución sexual de los 80 introdujo una liberación de las relaciones
de pareja, con cambios contínuos de pareja, amantes, relaciones
temporales o de una una noche, etc. Se desarrolló una sexualidad
insana e irresponsable, sin igualdad ni respeto. Esto trajo como
consecuencias, familias desestructuradas, madres solteras y el alto
índice de divorcios, uno de los tantos problemas sociales actuales en
Cuba, como lo son el alcoholismo y el suicidio.
A principios de los 90, Cuba dejó de recibir fondos anuales de la Unión
Soviética. Fracasó la zafra azucarera y resurgió la prostitución con otro
nombre, "jineterismo", palabra que le ha dado la vuelta al mundo.
En el caso de Cuba, debido a la carencia de bienes materiales
imprescindibles para los cubanos, las jineteras de 14-36 años, educadas
y profesionales, tienen las mismas necesidades y motivaciones:
comprar ropa, zapatos, jabones, desodorantes,
electrodomésticos, champú, uno o más dólares, etc.
Además, actividades a las que no tienen acceso, como pasear por el
país, hospedarse en un hotel, ir a restaurantes, discotecas, divertirse y
alimentarse bien y otras sueñan con casarse con un extranjero para
que las saquen del país. Tamibién existe la prostitución infantil de niños
de 8-12 años que ofrecen amor y sexo a cambio de un par de dólares.
Muchas jineteras vienen de familias respetables y hasta profesionales.
Existen familias donde el padre es oficial de la policía y la madre es una
destacada catedrática, militantes del Partido Comunista. Sin embargo,
la hija es jinetera, un hijo está preso por robo, otro por
contrarevolucionario y otro vive en el exilio. Es decir, los miembros de la
familia están enfrentados, es el peor drama que ha vivido la familia
cubana. El sistema dividió a la familia, haciendo 2 grupos: Los
Revolucionarios y los Gusanos. Como resultado, hay miles de familias
fragmentadas, heridas y desorientadas.
Aunque el gobierno de Cuba siempre lo niegue y quiera dismitificar
esa imagen que relacione a Cuba con la prostitución, fomentan el
turismo con la "hospitalidad" de la mujer cubana. Mientras negaban la
la prostitución en Cuba, no solo se beneficiaban de estos ingresos, sino
que las jineteras fueron las que resolvieron los problemas económicos
de muchas familias.
Según la Revolución, acabaron con la "doble moral sexual".
Cuando una mujer se mete a jinetera, ella es miembro de una
sociedad que no la enjuicia moralmente, no tiene dignidad, principios
morales ni resentimientos porque es libre y la Revolución
le dió la libertad de escoger. Pero la realidad es que la Prostitución
manifiesta los roles sexuales de hombres y mujeres porque los hombres
tienen que someter sexualmente a la mujer como una expresión de
machismo y consideran el sexo como un derecho masculino. Se
considera la vida de la mujer en función de satisfacer a los hombres.
La prostitución no es solamente un problema físico, es también un
problema moral, es el deterioro de las tradiciones y valores morales.
Como esclavitud de mujeres y niños es incompatible con la dignidad de
las personas humanas y con sus derechos fundamentales en cualquier
parte del mundo. Es degradante para el ser humano, degrada a la
sociedad y es una desorganización social. Lo que sucede es que en
vez de erradicar la prostitución, de aproximadamente 10,000 prostitutas
en el año 1959, han fomentado la liberación sexual de la
mujer, eliminado los valores familiares, morales y se ha multiplicado la
prostitución a más de 100,000 jineteras.
La buena noticia es que a pesar de los avances de la
Revolución en cuanto a igualdad de derechos y oportunidades para la
mujer, la Herencia Cultural y la Religión han transmitido fuertes
tradiciones domésticas y relaciones interpersonales que todavía
prevalecen con fuerza en los modelos sexuales tradicionales. Por eso
es que la religión es tan importante, porque revitaliza las tradiciones y
valores morales que transmite la familia para las nuevas generaciones.
Por lo tanto, los que se dedican al jineterismo son una minoría.
El problema económico no se puede ignorar, pero millones de hombres y
mujeres salen a trabajar y resuelven de muchas maneras, sin
prostituirse.
Elsa I. Pardo
eipardo2002@yahoo.com
2003
La prostitución tuvo su origen religioso en Babilonia, bajo "La
Prostitución Sagrada". Es antiquísima, complicada y difícil de erradicar.
En la antigua Grecia existían prostitutas públicas y privadas, en Roma
nació el "proxenetismo", la moderna prostitución occidental y los
actuales burdeles.
A partir de 1959, Cuba tuvo transformaciones económicas, políticas y
sociales, eliminando la prostitución tradicional que existe en todos
lados. Sin embargo, fue difícil eliminarla alrededor de los puertos, entre
funcionarios del gobierno y otras personas.
En 1971 se institucionalizó el sistema de las escuelas-internados en el
campo, para los adolescentes de 12 a 18 años de edad. Se
multiplicaron las madres adolescentes de forma alarmante. El 25% de
los niños nacidos anualmente tenían una madre menor de edad
y entre las mujeres que recurrían al aborto, entre el 30% y 40% eran
adolescentes. Los que causaron los embarazos, alumnos, adultos o
maestros, no tuvieron que temer ningún tipo de responsabilidad.
El exceso de libertad sexual, el alejamiento familiar, sin educación
sexual y la falta de base religiosa trajeron estos resultados. La religión
es un medio de comunicación que impone auto-disciplina y cierta
medida de ascentismo (renunciación), de acuerdo con las leyes de
Dios. Da apoyo psicológico, consolación y reconciliación.
Se desató un libertinaje en todo el país donde predominó el "amor libre".
La Revolución le dió a la mujer la libertad sexual, tener hijos sin
matrimonio, abortar cuando querían, embarazos y maternidad
involuntarios y aumentaron las enfermedades de transmisión sexual.
También se realizaban pesquisas de homosexuales para expulsarlos de
las universidades.
La revolución sexual de los 80 introdujo una liberación de las relaciones
de pareja, con cambios contínuos de pareja, amantes, relaciones
temporales o de una una noche, etc. Se desarrolló una sexualidad
insana e irresponsable, sin igualdad ni respeto. Esto trajo como
consecuencias, familias desestructuradas, madres solteras y el alto
índice de divorcios, uno de los tantos problemas sociales actuales en
Cuba, como lo son el alcoholismo y el suicidio.
A principios de los 90, Cuba dejó de recibir fondos anuales de la Unión
Soviética. Fracasó la zafra azucarera y resurgió la prostitución con otro
nombre, "jineterismo", palabra que le ha dado la vuelta al mundo.
En el caso de Cuba, debido a la carencia de bienes materiales
imprescindibles para los cubanos, las jineteras de 14-36 años, educadas
y profesionales, tienen las mismas necesidades y motivaciones:
comprar ropa, zapatos, jabones, desodorantes,
electrodomésticos, champú, uno o más dólares, etc.
Además, actividades a las que no tienen acceso, como pasear por el
país, hospedarse en un hotel, ir a restaurantes, discotecas, divertirse y
alimentarse bien y otras sueñan con casarse con un extranjero para
que las saquen del país. Tamibién existe la prostitución infantil de niños
de 8-12 años que ofrecen amor y sexo a cambio de un par de dólares.
Muchas jineteras vienen de familias respetables y hasta profesionales.
Existen familias donde el padre es oficial de la policía y la madre es una
destacada catedrática, militantes del Partido Comunista. Sin embargo,
la hija es jinetera, un hijo está preso por robo, otro por
contrarevolucionario y otro vive en el exilio. Es decir, los miembros de la
familia están enfrentados, es el peor drama que ha vivido la familia
cubana. El sistema dividió a la familia, haciendo 2 grupos: Los
Revolucionarios y los Gusanos. Como resultado, hay miles de familias
fragmentadas, heridas y desorientadas.
Aunque el gobierno de Cuba siempre lo niegue y quiera dismitificar
esa imagen que relacione a Cuba con la prostitución, fomentan el
turismo con la "hospitalidad" de la mujer cubana. Mientras negaban la
la prostitución en Cuba, no solo se beneficiaban de estos ingresos, sino
que las jineteras fueron las que resolvieron los problemas económicos
de muchas familias.
Según la Revolución, acabaron con la "doble moral sexual".
Cuando una mujer se mete a jinetera, ella es miembro de una
sociedad que no la enjuicia moralmente, no tiene dignidad, principios
morales ni resentimientos porque es libre y la Revolución
le dió la libertad de escoger. Pero la realidad es que la Prostitución
manifiesta los roles sexuales de hombres y mujeres porque los hombres
tienen que someter sexualmente a la mujer como una expresión de
machismo y consideran el sexo como un derecho masculino. Se
considera la vida de la mujer en función de satisfacer a los hombres.
La prostitución no es solamente un problema físico, es también un
problema moral, es el deterioro de las tradiciones y valores morales.
Como esclavitud de mujeres y niños es incompatible con la dignidad de
las personas humanas y con sus derechos fundamentales en cualquier
parte del mundo. Es degradante para el ser humano, degrada a la
sociedad y es una desorganización social. Lo que sucede es que en
vez de erradicar la prostitución, de aproximadamente 10,000 prostitutas
en el año 1959, han fomentado la liberación sexual de la
mujer, eliminado los valores familiares, morales y se ha multiplicado la
prostitución a más de 100,000 jineteras.
La buena noticia es que a pesar de los avances de la
Revolución en cuanto a igualdad de derechos y oportunidades para la
mujer, la Herencia Cultural y la Religión han transmitido fuertes
tradiciones domésticas y relaciones interpersonales que todavía
prevalecen con fuerza en los modelos sexuales tradicionales. Por eso
es que la religión es tan importante, porque revitaliza las tradiciones y
valores morales que transmite la familia para las nuevas generaciones.
Por lo tanto, los que se dedican al jineterismo son una minoría.
El problema económico no se puede ignorar, pero millones de hombres y
mujeres salen a trabajar y resuelven de muchas maneras, sin
prostituirse.
Elsa I. Pardo
eipardo2002@yahoo.com
2 comentarios:
Querida Elsa, está muy bueno tu artículo "El jineterismo y la sociedad cubana".
Las jineteras -palabra nacida en Cuba para referirse a una prostituta - comenzaron a ser un atractivo turístico en Cuba debido a la miseria que trajo consigo la tiranía castrista, y que arreció cuando el llamdo Período Especial cuando Rusia abandonó a los Castro y el hambre y la necesidad se posesionaron de la isla.
Estas pobres mujeres que caminan por las calles rotas y malolientes de la isla, venden sus jóvenes cuerpos por un plato de comida que poner en la mesa familiar, un jean o un par de zapatos.
Si bien la moral en Cuba se ha visto afectada por la falta de religión, por la separación de la familia y por la situación actual de la sociedad, la juventud se ha deteriorado de una manera trágica y difícil de comprender. Los jóvenes de hoy no tienen futuro, no pueden escoger lo que quieren estudiar, tienen que leer los libros que el régimen castrista les impone, no pueden hablar ni expresar sus ideas, y entonces, su escala se valores se rompe y deja de existir, y vienen otras cosas a llenar o a reemplazar esos valores.
Por eso le tengo lástima a las jineteras y a los putos, porque el destino les ha jugado una mala pasada: nacieron en la Cuba secuestrada por los Castro.
Martha Pardiño
Es falso que las jineteras corresponda al periodo de la revoluciòn. Es anterior, cuando los yanquis tenian a Cuba por balneario , burdel y garito. Ademas donde no hay protituciòn..... Lo digo con la independencia que me da ser colombiano, pero si se lee la historia se tiene el fundamento para desmentiros att Helmer
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