La sangre me hierve

Por Jorge J. Gastón

Cada vez que escucho al alcalde o a los comsionados de la ciudad de Miami hablar de los problemas económicos que sufre la ciudad debido al déficit presupuestario, la sangre me hierve, los dientes me rechinan y acabo calmando mi ira enviando una denuncia a los medios diciéndole a todos, bien en alto, que, ¿cómo es posible que una ciudad funcione cuando el 80% de su presupuesto esta dirigido a satisfacer altos salarios, pensiones y beneficios de todas clases a su alcalde, comisionados y empleados de la ciudad?

Imagínense arreglar calles y aceras, problemas de infraestructura de todo tipo, y todo lo demás que esa población necesita con solo un 20% de lo presupuestado para cubrir los gastos de la ciudad. Estoy casi seguro que no hay otro condado en todo el estado y quizás hasta en el país, que presente un presupuesto tan parcializado, mal confeccionado y antipopular como ese.

Señores comisionados, enfrenten ese problema con dignidad y valentia...hagan los ajustes necesarios inviertan esos números y se resolverán sus problemas económicos...
Soy un ciudadano de a pié que sufre ante lo mal hecho y el desparpajo de políticos
egoistas y mal situados en esos cargos por el propio pueblo a quien se supone sirvan con honestidad y sobretodo con mucha austeridad, como la que el momento actual reclama de todos.