Ineptos en el poder
Publicado en el Nuevo Herald, martes 14 de agosto 2012
Muchos gobernantes mienten, otros oprimen al pueblo, cometen actos criminales, violan los derechos humanos de los que los eligieron, cometen robos, toman decisiones equivocadas, en fin, no merecen ser reelegidos.
Pensamos que los votantes son inteligentes y van a elegir al más capacitado. Sin embargo, no es así. Muchos votantes no sólo toman en cuenta la capacidad de gobernar de los candidatos, sino que a veces votan por un candidato incapaz.
Cuando deciden por quién votar, predominan otros factores irracionales. Votan por simpatía, carisma, o porque les cae bien el candidato o la candidata. No importa que sea un desconocido o alguien que no tenga experiencia política, basta que sea agradable y caiga bien. Lo único que hace falta es que el candidato se postule y capte la atención de un periodista, la radio o la televisión, hable de algún tema que conoce y se convierte en una figura pública, capaz de derrotar al candidato más capacitado.
El voto se decide de otro modo. El carisma del candidato, una buena campaña, los aspectos culturales y sociales son importantes, pero sobre todo cuenta la emoción, el afecto y no el intelecto. El amor es ciego.
Elsa I. Pardo
Miami
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