El próximo 10 de septiembre la Organización Mundial de la Salud celebra el Día mundial para la Prevención del Suicidio. En Cuba los suicidios ocurren con más frecuencia y ocupa el primer lugar de los países con más alto índice de suicidios en el continente.
La Organización Mundial de la Salud señaló que en 1963 el índice de suicidios en Cuba fue de 10.2 por cada 100,000 habitantes. Sin embargo, en 2006 el índice fue de 18.5, el más elevado del continente, que posee un indicador inferior al 6.5. En el 2012 Cuba y Uruguay compartían el triste puesto de ser los países del hemisferio con la mayor tasa de suicidios.
Hay varias teorías del “Suicidio” pero la más influyente que ha prevalecido desde 1897 es la del sociólogo francés Emile Durkheim. Según él, los suicidios son fenómenos individuales que responden a causas sociales y no psicológicas, aunque en algunos casos, había una predisposición psicológica causada por una fuerza social. Dice que el suicidio está relacionado con el grado de “integración” y “regulación” social de un individuo con la sociedad. El establece varios tipos de suicidios y en el caso de los cubanos, el más característico es el “suicidio Fatal”, o exceso de regulación y opresión política-social que incide en un elevado riesgo de suicidio.
Desde el punto de vista psicológico, son muchos problemas como el ambiente social sin horizontes, el alcoholismo, la depresión colectiva, la perdida de empleo, la desesperanza, decepción y tristeza. ¡Creo que a pesar de que las estadísticas oficiales no son confiables, el Sol no se puede tapar con una mano!
Elsa I. Pardo
Socióloga
Socióloga
Miami
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