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Hace pocos días se le brindó un homenaje al presidente de Panamá Ricardo Martinelli, quien explicó su decisión humanitaria de dar visa y asilo político a 21 cubanos detenidos en Bahamas.
En estos momentos, ya hay 9 de los 21 cubanos en Panamá con Residencia Permanente y Permiso de Trabajo, 6 en Estados Unidos y 6 en Europa. Según la ACNUR hay 17,000 refugiados colombianos y se le otorgó Residencia Permanente a alrededor de 863 refugiados del Darién que ingresaron en 1996, huyéndole a la violencia del conflicto en Colombia, a muchos venezolanos, a 1,000 salvadoreños y de otras nacionalidades que han pedido refugio y asilo político.
Recientemente, Panamá aprobó el Decreto Ejecutivo No. 548 del 14 de Mayo del 2013, que otorga Residencia Permanente a inversionistas, jubilados, profesionales, trabajadores de empresas multinacionales, o personas sin antecedentes penales y hasta con contratos de trabajo a nacionalidades de 49 países de América, Europa y Asia, incluyendo Estados Unidos. Los requisitos son mínimos y la Residencia es extensiva a padres, esposos e hijos.
Y, en agosto, el Parlamento de Panamá aprobó una ley que abre el camino para que todos los refugiados y asilados políticos obtengan la Residencia Permanente.
Panamá tiene una larga e histórica tradición de dar asilo político y refugio a todos los que lo necesitan. Felicito al presidente Martinelli por sus acciones humanitarias y por ser un paladín de la democracia.
Elsa I. Pardo
Miami, Fl. |
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